Para mí esta pregunta no es fácil de contestar.
Antes de iniciar la carrera de Educación Primaria, mi sueño o
mi meta no era el de estudiar esta carrera, nunca me hubiese imaginado
estudiarla si no hubiese sido por mi madre, porque siempre he pensado que deben
estudiarla aquellos que tengan vocación por los niños, por enseñar y por
aprender de ellos.
Siempre he creído y opinado que la carrera de Educación,
tanto Primaria como Infantil, están infravaloradas, porque casi todas las
personas piensan que hay que estudiar menos o que requiere menos esfuerzo, pero
la dificultad o el esfuerzo no es lo importante de una carrera, lo
verdaderamente importante es la dedicación y la vocación que le preste cada
persona a su carrera o a su futuro trabajo.
¿Qué sería de los niños
de las personas que tanto critican a esta profesión si los futuros docentes no
tienen interés o vocación por enseñarles?
Es una pregunta que nadie se hace, tan solo se centran en
criticar esta profesión como si fuese algo regalado o le tocara a alguien en un
sorteo o en la tómbola.
Por esta razón, pienso que se puede saber a ser maestro antes
de serlo porque la vocación no se aprende, es algo que viene dentro de cada
persona y por más tiempo que pase no es algo que se pueda aprender.
Por otro lado, como anteriormente he mencionado, nunca me
hubiese imaginado en esta carrera, porque nunca me lo había planteado y como
antes he dicho, no todas las personas tenemos vocación hacia esta carrera y siempre
he pensado que la educación de los niños, de antes, de ahora y de un futuro,
debería estar en manos de esas personas, pero si no hubiese entrado en esta
carrera nunca hubiese descubierto que en realidad sí me interesa y que cada día
estoy más motivada y tengo más ganas de acabar para comenzar la aventura de ser
maestra, porque en realidad no hay una cosa más bonita que transmitir tus
conocimientos a niños, por lo que pienso que hace falta estudiar, y hacer las
prácticas de esta carrera para coger experiencia, porque al fin y al cabo la
experiencia sólo se obtiene con años de prácticas o mejor dicho, una vez que ya
eres maestro.
Cristina, no entiendo nada. ¿Tienes vocación o no? Si no la tienes, que es lo que me parece entender, ¿no vas a ser buena maestra? Y si la tienes, ¿vas a ser buena maestra? ¿Qué tiene que ver la vocación con aprender a ser maestra?
ResponderEliminarSi no tienes vocación pero ahora resulta que te gusta ser maestra, ¿qué más da que la vocación sea innata o no, que se aprenda o no?
¿Toda maestra que tiene vocación desde chiquitita es buena maestra? ¿No habrá malísimas maestras por muy vocacionales que sean? ¿Y no habrá buenísimas maestras que nunca hayan sentido vocación?
En todo caso, el problema de si se puede saber ser maestro antes de ser maestro tiene que ver con la formación, con los documentos que hay en el campus, y esos no aparecen aquí para nada.
Es una entrada de opinión personal pero sin ningún apoyo en las lecturas o en las clases.
Profesor, creo que no he sabido expresarme correctamente. No me refiero a que sin vocación no se pueda ser buen maestro, sino que es algo clave para serlo y que gracias a entrar a esta carrera me he dado cuenta de que sí sirvo para esto.
ResponderEliminarCreía que podía hacer una entrada de opinión personal, ya que algunas entradas de algunos compañeros también comparten opiniones.
Disculpe.